//PROSPECTIVA:// Súmate, vamos bien…
José Gerardo Mosqueda Martínez
En otras ocasiones he compartido con ustedes algunas referencias acerca del futuro de los instrumentos de control político del actual gobierno a llegando a la conclusión de la fragilidad con la que se comporta el presidente, que ha tenido un cuidado especial para llevar el proyecto de la sucesión presidencial que en esta ocasión es la única materia de preocupación del presidente.
El convocó a las corcholatas, indicó los tiempos de la agenda de sucesión, instruyó dónde y cómo deberían de comportarse en el proceso y, por si fuera poco, los hizo firmar su compromiso de no estropear sus iniciativas porque de lo que se trata es de la sucesión y prolongación de él en las decisiones.
Mientras eso sucedía, en la suprema corte evoluciona el tema del plan B y llegan a la conclusión 9 de los 11 magistrados que la propuesta presidencial no va y deberá apegarse a los términos que ya tenían las normas de los procesos electorales, es decir, el arranque de la precampaña que no es precampaña está fuera de la norma y sin embargo los seis “ungidos” salieron corriendo a buscar a sus seguidores, acarreados, gratificados en especie y en efectivo, ensayando sus mejores propuestas y mensajes ante unos auditorios de “alineados”.
A una semana parece que de los seis pronto se hablará sólo de tres, los que tienen dinero suficiente, aliados inversionistas y sobre todo los que saben que el proceso no importa, lo que interesa es definir quién será el sucesor del actual presidente, si es que eso se llega a dar.
Es verdad que la alianza opositora sigue en el desgaste y este lunes compartirán porque escogieron el método y los tiempos que escogieron (curiosamente su brillantez alcanza para concluir que también van a hacer encuestas y una versión timorata, miedosa, torpe de una elección primaria donde sigue en discusión cómo se van a dar las alianzas con los organismos de la sociedad mexicana.
Los movimientos obligados en el gabinete presidencial obedecen a los relevos para seguir operando los recursos que permitan mantener a los votantes en disposición de obsequiarle su voto al MORENA.
En las encuestas que se publican hay varios temas comunes: cuando se describe una elección con la típica pregunta: ¿si hoy fueran las elecciones por cuál partido votaría? En los procesos presidenciales predomina la tendencia a favor de Morena, cuando se comparan nombres de posibles candidatos; el resultado ya no es igual, en la medida que se comparan personas los porcentajes tienen un comportamiento muy diferente y sin posibilidades (por ahora) de un pronóstico confiable.
Por el momento los seguidores de la iniciativa de MORENA están evidenciando que las urgencias del presidente porque su proyecto ya esté en marcha para la sucesión presidencial no ha sido la mejor idea y lo que vemos es un desgaste y falta de credibilidad en el proyecto de la sucesión porque las corcholatas del presidente no están llenando las expectativas y los mensajes que mandan en sus discursos están muy lejos de ser convincentes.
Es probable que en unas semanas tengan que hacer ajustes a sus iniciativa, no solo por la ineficacia de la misma sino porque la alianza opositora estará en la misma agenda y la capacidad del presidente para mantener la lealtad a su proyecto empieza a tener dificultades; sus obsesiones por permanecer en el poder a través de sus obras faraónicas y los programas de gasto social, que ha tomado como un proceso de compra del voto de los mexicanos a través de los recursos que reciben en los programas de gasto social.
Quien esté preocupado por los pronósticos de votación en los procesos del 2024 va a tener que esperar algunos meses para darse cuenta que el desencanto hacia eso que todavía le llama cuarta transformación, está poniendo en riesgo de alta tensión que su proyecto tenga que ser sustituido porque no llena las expectativas de los propios seguidores de la propuesta de morena.
Una nueva oportunidad para la alianza opositora y para la sociedad en general de liberarse del desastre que representa el actual gobierno y sus estrategias que sólo responden a la necesidad de mantenerse en el poder al precio que sea.
Al sumarte a los proyectos de la sociedad, contribuyes a la fortaleza que se requiere para proponer poderes legislativos nacionales y estatales, ayuntamientos, autoridades en general que reaccionen con afinidad a visiones que no dan continuidad al desastre político que vive el país.
Las tribus que le tripulan el mando al presidente no saben que sigue en cuanto a la estimulación de la intención de voto de los jóvenes, es posible que sus análisis de la intención de voto no han evolucionado y como derivado de un gobierno autócrata y con la ansiedad que les produce estar en riesgo de perder el poder sigan endureciendo sus posiciones contra todo aquel que no entre a la agenda de la sumisión.
El segmento de población que estará representando mayor dificultad sigue sin resolverse, no es de morena, pero tampoco lo es de otras propuestas políticas, desde luego no es del frente opositor, es el gran tema de discusión en el futuro inmediato de los procesos electorales.
Hasta la próxima en PROSPECTIVA.
José Gerardo Mosqueda Martínez,
Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato
gmg@gerardomosqueda.com.mx