EL NIGROMANTE UN HOMBRE DE VERDAD
Por Juan Miguel Ramírez Sánchez
«Toda restricción a la manifestación de las ideas es
inadmisible y contraria a la soberanía del pueblo»
Ignacio Ramírez.
Innumerables personajes han nacido en suelo guanajuatense, entre ellos podemos mencionar a Juan Ignacio Paulino Ramírez Calzada, mejor conocido como Ignacio Ramírez “El Nigromante”, quien nació en San Miguel el Grande, Guanajuato, hoy San Miguel de Allende, el 22 de junio de 1818, hace días cumpliría 205 años. Murió el 15 de junio de 1879, hace días cumplió 144 años de su fallecimiento y su pensamiento y sus actitudes siguen vigentes, son un ejemplo a seguir.
El guanajuatense Ignacio Ramírez “El Nigromante” fue maestro, sociólogo, magistrado, periodista, legislador, físico, biólogo, ensayista, jurista, dramaturgo, geógrafo, filólogo, naturalista, paleontólogo, ministro, economista, polemista, poeta, síndico, agente del ministerio público, miembro de los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial, secretario de gobierno de distintos Estados, humanista, escritor, filósofo, historiador, precursor del modernismo, orador, científico, masón grado 33, precursor en literatura del modernismo, cuentista, pero ante todo fue un militante político, un pensador crítico y un hombre de acción. Se caracterizó por ser incorruptible e intransigente.
Muchas de sus ideas no estaban enmarcadas en ese momento en la ideología liberal, él era un liberal radical: peleó decididamente por la grandeza de la cultura indígena; se pronunció por la asociación de los trabajadores para mejorar las condiciones profesionales, económicas, sociales y políticas; creía en la libre manifestación de las ideas cuya restricción era un atentado a la soberanía del pueblo; estuvo contra la pena de muerte; luchó porque la desamortización de los bienes no afectara a las comunidades indígenas; planteó los derechos políticos de la mujer y muchas otras cosas más.
El guanajuatense Ignacio Ramírez “El Nigromante”, es sin duda, entre los grandes hombres del siglo XIX, el personaje más íntegro desde el punto de vista ideológico-político. Es un humanista de altos vuelos, enraizado profundamente en su patria, un intelectual que sobresalió en el periodo de nuestra historia, que vio a hombres agigantarse hasta alcanzar el título de héroes. Vivió en el torbellino de un periodo histórico en el que se formó la nación mexicana.
Hubo y hay mexicanos bien nacidos, que vislumbran rumbos nuevos. Los hay y habrá siempre. El Nigromante fue uno de ellos. No solo reflexionó sobre las necesidades de un pueblo apremiado de nación, fue más allá, e hizo de su conducta e ideas un proyecto de futuro. Que sea parte del ejemplo, y de la inspiración de las generaciones actuales.
