NECESARIO Y URGE UN PROYECTO INTEGRAL DEL AGUA PARA CELAYA
*Las políticas públicas se tienen que enfocar en la realización de obras hidráulicas que ayuden a preservarla, a promover la cultura del agua y el reúso de la misma: Villatoro
POR AGP
Celaya, Gto. (2 de junio de 2021).- Es urgente generar políticas públicas y un proyecto integral en materia de agua en Celaya y la región, para «evitar que nos alcance el “Día Cero”. En algunos lugares ya se está racionando el agua, se suministra sólo a determinadas horas, porque no se ha hecho un manejo correcto de ella y las sequías han afectado gravemente los mantos freáticos, existiendo un déficit impresionante, porque no se alcanzan a recuperar con las lluvias. El proyecto integral tiene que incluir, tres aspectos: obras hidráulicas, la cultura del agua y el reúso de la misma.
Así lo expuso José Frederman Villatoro Rebolledo, consultor de Aguas Nacionales y director del despacho Gestión y Manejo Profesional del Agua (Gempa), considerando que la próxima administración municipal, principalmente el responsable del manejo del agua, tiene que visualizar muy bien el futuro de Celaya, en materia de agua, y empezar a generar la infraestructura que permita prevenir y solucionar, a mediano plazo, el problema que va a enfrentar Celaya y la región, porque tanto este municipio como los vecinos comparten el mismo acuífero, el del Valle de Celaya: Apaseo el Grande, Apaseo el Alto, Tarimoro, Cortazar, Villagrán, Juventino Rosas, Comonfort y San Miguel de Allende.
Celaya y Guanajuato tiene un acuerdo de veda desde 1954, porque desde esa fecha, tanto el Acuífero de Celaya, como los otros 20 que existen en el estado, empezaron a tener problemas de recuperación. A partir de entonces ya no se dieron más concesiones, pero se han mantenido las que se dieron, porque quienes ya no las necesitaban para regar sus parcelas, al ser absorbidas por la mancha urbana, las vendieron y las explotan, aunque ya no puedan extraer los volúmenes asignados. En 2019 se registró un déficit aproximado a los 132.9 millones de metros cúbicos en el Valle de Celaya, según reporte de la CONAGUA.
Debido a que no ha habido un manejo correcto, ni a nivel federal, ni a nivel estatal, ni municipal, es posible que pronto se tengan que tomar otras medidas “para evitar que nos alcance el ‘Día Cero’, que será el día en que tú abras la llave de tu casa y no salga agua”. Ese día el agua va a ser mucho más cara.
Para empezar se requiere actualizar la Ley de Agua Nacionales, que data de 1992, a 30 años de diferencia, la realidad es muy diferente; la ley que sustenta las políticas hídricas está rebasada; no hay políticas públicas que realmente impulsen u “obliguen” al ahorro del agua, un tema que se lleva y sea trae por todos lados, pero no se ha impulsado con mayores apoyos para la tecnificación del campo, introduciendo otras técnicas, como el riego por goteo, por ejemplo, porque es en el campo donde se consume el 80% del agua que se extrae del subsuelo para producir alimentos. A raíz de esa ley se constituyeron los Consejos Técnicos de Aguas (Cotas)*.
SE LE TIENE QUE APOSTAR AL FUTURO
Se tienen que invertir más recursos en infraestructura, en obras que, aunque parezcan inútiles de momento, como los “pozos de absorción”, bien hechos, con todas las especificaciones de la norma mexicana, van a representar un beneficio invaluable; pero se requiere verdadera voluntad política para ese tipo de obras que no reditúan de manera inmediata.
Hay muchos aspectos que no corresponden al municipio, pero es el municipio el primero que debe incidir, gestionar, buscar recursos donde los haya para todas las obras que se requieren, como más plantas de tratamiento y darle el mejor uso al agua tratada, que permita ahorrar la que se extrae y obtener ingresos para el municipio.
Para ello se requiere un plan integral, que sustente las obras y las políticas públicas, conscientes de que los resultados no son inmediatos, sino a largo plazo y que se requiere mucho dinero, como traer el agua de El Realito, cuya gestión debe ser inmediata y aunque es una solución temporal, de 25 años, ese tiempo puede permitir la recarga de los mantos freáticos.
El proyecto de El Realito tiene todavía muchos problemas que se tienen que resolver por las autoridades competentes, pero hay que gestionarlo, como el derecho de vía para la conducción, donde hay problemas no sólo de pago de derechos, sino también problemas civiles por cuestiones de herencias, entre muchos otros. Pero hay que empezar, porque es urgente.
CULTURA DEL AGUA PARA AHUYENTAR EL “DIA CERO”
Un tema en el que el municipio tiene mayor injerencia, a través del organismos operador y de todas las dependencias, es el de la cultura del agua hacer conciencia del uso y reúso del agua, no sólo en el campo y en la ciudad, sino en la misma casa; es algo que todavía no valoramos, pero se tienen que impulsar formas económicas de darle un segundo uso al agua y captar el agua de lluvia para algunos usos. Eso es algo, que para muchos es impensable, porque se nos olvida que el agua es un recurso finito y que un día podemos no contar con él o que sea demasiado caro.
a cultura del agua debe permear más en la sociedad; se dice que los niños son los que aprenden mejor, si se les enseña desde la escuela, pero son los adultos quienes tienen esa responsabilidad.
Dada la importancia que representa este tema para el municipio, como autoridad, pero también para toda la sociedad, se debe crear un departamento de Cultura del Agua, no sólo para difundir mensajes, sino para generar acciones concretas, apoyos, innovaciones en las áreas públicas, que con poco dinero se puedan replicar en los hogares.
Hay que evitar, a toda costa, que nos alcance el “Día Cero”.