Bajas temporales en MIPyMES por COVID-19: Macías
*Se frenó la reactivación económica por incremento en contagios y por el regreso al Semáforo Rojo
POR AGP
Celaya, Gto. (17 de enero de 2021).- Tras señalar que el regreso al Semáforo Rojo frenó la reactivación económica, Víctor Manuel Macías Paredes, dijo que el aumento de contagios por COVID-19 ha ocasionado bajas temporales en la industria local, principalmente en las MIPyMES.
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), en Celaya, dijo que, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Información (INEGI) y del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), se han perdido más de 640 mil empleos en México, lo que significa una baja del 3.2%; el más afectado ha sido el sector servicios con reducción del 9.45%. No fue mayor, por el esfuerzo de los empresarios y de algunos gobiernos estatales, porque del gobierno federal no ha habido apoyos.
Desde que se implementó el programa de reactivación gradual, se generaron expectativas favorables; sin embargo, el regreso al Semáforo Rojo, cortó con la posibilidad de una reactivación inmediata; pues, incluso en enero, que es cuando se vuelven a contratar trabajadores, el movimiento ha sido lento.
Hoy, hay más incertidumbre, porque tampoco el gobierno ha proporcionado información completa sobre el manejo del semáforo y el futuro inmediato.
SE REQUIEREN APOYOS FISCALES O DIFERIR PAGO DE IMPUESTOS
Las grandes industrias, que tienen posibilidades de implementar protocolos más completos, con estándares internacionales, no tienen tanto problema; pero las micro y pequeñas empresas, muchas de ellas familiares, enfrentan otro tipo de situaciones para poder subsistir. En estos casos, es necesario que haya apoyos fiscales por parte del gobierno; al menos, prórrogas para el pago de impuestos.
El presidente de la Canacintra, dejó en claro que las ausencias laborales por contagios de COVID, no se deben a que se hayan dado en las empresas, sino fuera de ellas, en la familia o en los lugares donde los trabajadores acuden a socializar.
Independientemente de ello, los trabajadores se tienen que separar de su trabajo y recluirse en sus casas. Las empresas grandes tienen la posibilidad de suplirlos, las pequeñas o familiares tienen que cerrar, al menos, temporalmente y, otras, de manera definitiva.
La única esperanza es la vacuna, pero la aplicación va demasiado lenta.