CALAVERAS LITERARIAS 2021

 

CALAVERAS

Bienvenida la Muerte,
bienvenida la Catrina,
la Calaca, la Huesuda,
la Calavera con su rima.

Todo lo que aquí se diga
no se lo tomen en serio,
son simples calaveras
que a unos dan por muertos.

 

 

 

 

JAVIER MENDOZA

Sincerándose con la Parca
Javier Mendoza, el alcalde,
le habló de sus sentimientos
y del amor que lo invade.

Le dijo: “quiero a Celaya,
por ella trabajo y vivo,
si vienes por mí ahora,
tres años de más te pido.

Déjame hacer la talacha,
cumplir con mis compromisos,
saldar las cuentas pendientes
y despedirme de los amigos.

La Parca sin miramientos
reconvino con firmeza:
“la muerte no se negocia
como cualquier presidencia”.

Por concesión extraordinaria,
la Parca ya muy Catrina,
recibió en el cementerio
al gran amor de su vida.

DIEGO, PEÑA, SINHUE Y EL PRESIDENTE

En la fibre de la innovación
que sinhue impulsó en Guanajuato
llegó la Catrina emprendedora
a instalar un nuevo camposanto.

El Valle de Muerte Segura
prometía experiencias digitales
a progresistas y conservadores,
con fantasías neoliberales.

Buscando asegurar su futuro
en tal dimensión etérea,
el Presidente cambió el Palacio
por un mausoleo con Peña.

Ahí se encontró con Diego
gozando de tales lujos,
se olvidaron las ofensas
y también lo de tartufo.

La Catrina anda rete contenta
con Sinhue de promotor,
vendiendo con tanto esmero
simples fosas del panteón.

La realidad aumentada
de experiencias sensoriales,
activó el innato gen político
de imponer más cargas fiscales.

El Valle perdió su atractivo
luego de cumplir su función,
pero los políticos se unieron
para alimentar su ilusión.

ELVIRA PANIAGUA

Una Catrina muy encopetada,
con altos aires de grandeza,
le dio por pasar a Celaya
No’más por una ex alcaldesa.

-”Yo sí cumplí con lo que debía:
dejé boyante la presidencia,
los muertos que a mi me achacan
no eran de mi incumbencia”.

Con ese afán de escudarse
la Muerte quedó convencida,
que había llegado el momento
de enviar al panteón a Elvira.

Su lápida recuerda y resume:
“Se erige este monumento
por orden y disposición
de quien presidió el ayuntamiento”.

VILLARREAL Y TREJO

En este mundo profano
de políticos corruptos,
llegó la Parca cargando
a Villarreal por difunto.

En el pueblo se especula
que tal suerte y tal momento,
sólo pudo ser provocado
por un tal Trejo Pureco.

Ignorando en ese instante,
que Mauricio el presidente,
sufría de los mismos males
y por él iba la Muerte.

Políticos en desgracia,
se ven en todo momento,
se turnan en poder
y se miran con despecho.

La Muerte dio por sentado,
que entre Trejo y Villarreal
la única solución sensata
era sepultarlos en la vida real.

 

 

 

ALVAR Y ZAMARRIPA

La Parca llegó con cautela
por Alvar y Zamarripa,
la guardia no tuvo empacho
en hacerse desentendida.

El crimen en Guanajuato
ha pasado por su vista,
las muertes a todas horas
exacerban la política.

Con hábil disertación
la Parca muy instruida,
caminaba rumbo al panteón
con Alvar y Zamarripa.

Aquí estarán seguros,
vivirán en la opulencia,
sin tener que aparecer
en aburrida comparecencia.

Así la Parca se llevó
a Alvar y Zamarripa,
librando al gobernador
de su atasco en la política.

LUIS ERNESTO AYALA

La Calaca muy bien vestida
llegó una tarde al Congreso,
quería cargar con los diputados
“dignos” representantes del pueblo.

Siempre con mucha decencia,
pero en franca oposición,
Luis Ernesto planteó alternativas
y someter la propuesta a votación.

-No es asunto que requiera
el voto de los diputados,
aquí siempre gana el PAN,
pa’que le hacemos al engabanado.

Con Luis Ernesto a la cabeza
marcharon al cementerio,
la Calaca los sepultó
sin dictamen de por medio.

Guanajuato perdió a su Congreso,
no había razón de su existencia,
la Parca lo liquidó
por perder su independencia.

 

 

MONSEÑOR AGUILAR LEDESMA

Sin respeto a ninguna autoridad
la Muerte llegó al obispado
ahí estaba monseñor Aguilar
realizando su apostolado.

En franca conversación,
la Muerte que lo visitaba
le anunció que sólo fue por él,
que presto lo acompañara.

A pesar de su obediencia,
experimentó cierta contrariedad,
porque en poco tiempo dejaba
a la feligresía en la orfandad.

Sacerdotes y feligreses
recuerdan con devoción,
la memoria de un obispo
que este día la Muerte se llevó.