DE LAS MUCHAS LECTURAS DE LAS DOS ELECCIONES DEL 4 DE JUNIO
JOSÉ CARLOS GUERRA AGUILERA
1.- Puede haber muchas lecturas de las dos elecciones estatales del 4 de junio.
2.- No pretendo descubrirlas, solo apuntar algunas conjeturas.
3.- Por ejemplo, parece que el abstencionismo fue alto, lo que puede reflejar desilusión, abulia, falta de civismo y hasta eso que se dice enunciar como “importa m…”
4.- Por ejemplo, pudiera ser que la candidata del PRI no tuviera relevancia o notoriedad, o fama, o arrastre y fue fácil para MORENA.
5.- Se dice que la misma candidata fue abandonada por el Gobernador saliente; el que espera una embajada, en cambio la candidata de Morena tuvo un apoyo abierto, amplio, generoso.
6.- Podríamos elucubrar: ¿cómo pudo ganar la candidata de Morena, teniendo fama de ser delincuente electoral?, y la respuesta podría ser: el gran publico no está enterado de muchos matices falsos o verdaderos de los candidatos.
7.- Y el gran tema, si en el 2000 se votó con Fox en contra del PRI, hace 23 años, hoy solo queda un estado con ese Partido. Si Atlacomulco era la catedral del PRI, la gran cuna de muchos políticos buenos y malos, hoy la sepultura está abultada, y MORENA va impetuosa al 2024.
8.- ¿Si gano una mujer las elecciones del Estado de México, podría tener éxito una candidata mujer para la Presidencia de la Republica? No sugiero que sea la famosa Claudia, ya que es posible que surja un grave problema:
9.- La Constitución solo permite ser candidato a presidente de la República a los mexicanos por nacimiento, y se ha empezado a escribir que ella tiene doble nacionalidad, que es judía, que nació en otro país y no en México.
10.- Cierto o falso, el principal contrincante de ella, el señor Marcelo debe tener como secretario de Relaciones Exteriores, localizada el acta de nacimiento de ella y así como salió que una ministra de la Corte no tenia, ni tiene, titulo legítimo, quizás hacer aparecer un documento relevador para que “en su tiempo”; pues al final, de cuentas en la guerra política todo se vale y como el célebre Catón ha sentenciado: “de política y cosas peores”.