Educación NO, manipulación ideológica
José Gerardo Mosqueda Martínez
En medio del desastre en el que ha puesto al país el actual gobierno, sin estrategia de seguridad, sin interés por la salud de los mexicanos, enfocando los recursos de los mexicanos a los caprichos presidenciales, con el mayor daño ecológico en el sureste y la península… no hace falta hacer nuevas historias… pese a todas las advertencias de maestros, de expertos en análisis de los procesos educativos, profesionales de la pedagogía, de la psicología educativa… damos un salto para atrás.
Sin consultar, sin recoger aportaciones de científicos y conocedores de los procesos educativos, simplemente… porque al autócrata se le ocurre y del mismo modo que Nicaragua o Venezuela, se cambiaron los contenidos de los libros de texto gratuito y pese a qué hay amparos concedidos por el poder judicial federal; el gobierno de México ha decidido qué hay que enseñar a combatir el neoliberalismo y “su modelo meritocrático, elitista, patriarcal y racista”.
Ahora ya no habrá materias sino “campos educativos” los maestros serán agentes de transformación, la persona pasa a segundo plano porque lo que importa es la comunidad.
Los nuevos héroes en los libros son los guerrilleros, se trata de formar militantes de sus causas políticas.
Por iniciativa de padres de familia se promovieron amparos que fueron concedidos por la autoridad judicial del país, pero al presidente no le importa que se cumpla la ley y ha ordenado que los libros de distribuyan “… es que ya estaban impresos” ha dicho el presidente López.
Toca el turno del desastre al sistema educativo del país y durante las próximas semanas parece que será la nueva batalla de los mexicanos contra el gobierno autócrata.
El gobierno mexicano está apresurando el paso a su estrategia de confrontación con la sociedad que cada día se acerca más a las propuestas de un bloque opositor ante el escenario de amenaza, que estiman los estrategas de la izquierda burócrata.
Las tribus que le llevan de la mano al autócrata, no les ha quedado más remedio que evidenciar sus maniobras para llevar la política nacional al escenario de confrontación ideológica y de fuerza política… viene las acusaciones, más mentiras del bloque gubernamental, más cinismo en la comunicación de las decisiones del gobierno federal, más tiempo perdido para educación de los niños y jóvenes mexicanos.
Parece que partieran de la premisa, invadida de miedo, a que su transformación, que es como un salto al pasado, no sea bienvenida por las familias mexicanas que, si bien muchas de ellas estarán recibiendo el dinero de los programas de gasto social, pueden razonablemente distinguir el dinero que reciben (los que lo reciben…) del compromiso a mantenerse pasivos ante el adoctrinamiento de sus hijos.
Desmantelando el sistema de educación básica, que parece ser el propósito; la estrategia del gobierno consiste en llevar la propuesta autocrática al modelo de gobierno populista, es decir, estamos en la agenda populista en la fase de transición de poderes legales. si no funciona, es decir, si no logran ganar las elecciones, tendrán muchos seguidores con los que puedan exacerbar la polarización, enfrentando a los ciudadanos en la polémica propiciada por el gobierno en turno y monitoreada para chantajear a los que reciben recursos de los programas sociales con lo que evitarán que dejen su lealtad a la deriva.
No es el deseo de servir lo que los tiene apoltronados en los recintos del poder político, en cierto modo son los temores de que no les salgan sus maniobras, pierdan la presidencia de la república y las mayorías en las cámaras y por tanto se frustre en definitiva la “vía democrática a una dictadura”. Es decir, la que se está construyendo a base de mentirle a la sociedad, de más corrupción y de la mayor polarización entre la sociedad.
Una lucha de los mexicanos por defender derechos elementales de una sociedad democrática, pasa por una gran flexibilidad de comunicación política, por descubrir nuevos liderazgos, por proponer nuevos espacios de vinculación entre las organizaciones de la sociedad.
Todo eso es posible cuando no se puede de vista que la confrontación que ha propiciado el actual gobierno se trata de populismo-dictadura o democracia-Libertad.
Hasta la próxima en PROSPECTIVA.
José Gerardo Mosqueda Martínez,
Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato
gmg@gerardomosqueda.com.mx