El nuevo nombre de la Paz. ¿… y cuáles son las causas?
José Gerardo Mosqueda Martínez
Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato
Todos los días escuchamos que la estrategia para combatir la violencia en el país no tiene que ver con las demandas que todos los ciudadanos hacemos en todo el país… El presidente López dice hasta cuándo no se le pregunta qué su estrategia es la mejor porque ataca desde las causas…
Pero es el sexenio con más muertos (le faltan dos años y cuatro meses), al día de hoy, es el sexenio con más muertes en la historia documentada de nuestro país: los problemas endémicos de salud, el pésimo manejo de la pandemia y los crímenes dolosos, el país con más personal sanitario que ha perdido la vida en el combate a los contagios por COVID.
Recuentos de daños hay casi a diario, pero no cambia la estrategia y crece el número de muertos y de explicaciones y de polémicas y de confrontación con sectores de la sociedad.
¿Conoce usted algún documento que reúna los análisis, el trabajo de campo, los comentarios de estudiosos de la realidad existente en la nación respecto al tratamiento que se le ha dado a las causas de la inseguridad que vive el país?
Si el presidente quisiera entender que sus afirmaciones respecto a la estrategia de seguridad de la nación, no tiene evaluación alguna, no cuentan con un sistema de monitoreo a partir de sus causas…
¿Qué caso tiene seguir insistiendo que la estrategia está bien?
Cuando no hay nada que detenga el número de ejecutados en todos los estados del país, de masacres, de muerte de personas inocentes en medio de los pleitos por el control de las plazas de distribución y venta de drogas en el país, en medio del pleito por la hegemonía de los grupos delictivos que reclaman el control territorial y esas nuevas formas de esclavitud con las que se recluta a más sicarios que defienden el control de sus zonas de distribución.
Tendremos que “adivinar” a cuáles causas se refiere… ¿será a la educación? Nunca ha estado más desatendida en el país y después de la pandemia sigue desarticulado el sistema educativo y con los mayores índices de deserción desde que existe el sistema educativo en nuestro país.
Cabe la pregunta: ¿existe una estrategia en materia de seguridad nacional? ¿Se llama estrategia a la lista de acciones que realiza el personal de las fuerzas armadas, empezando por las juntas de las 6 de la mañana de todos los días?
Me permito sugerir al presidente que tome la propuesta de plan de Paz que le hace la jerarquía de la iglesia católica, estoy seguro que no tendrá que pagar ningún derecho de autor, tal vez le quiera hacer algún “ajustito”, no creo que a los Obispos mexicanos les incomode el hecho pero, por lo pronto, ya tiene una estrategia (si quiere llamarle así).
Y como su megalomanía no le alcanza para semejarse a Jesucristo, pues también puede encabezar las jornadas de oración e incluirse en las intenciones de la misma.
También puede ser buena idea que llame a los Obispos y les pregunte cómo le hacen para iniciar las JORNADAS POR LA PAZ y desde luego qué sería muy importante para romper las cadenas de violencia mediante el diálogo y empezamos a reconocer el valor que tiene nuestro prójimo en el trabajo para construir La Paz en nuestra patria, es decir, empecemos por reconocer que la estrategia de seguridad no se llama igual que usted, señor presidente, que la lista de mentiras está reciclada desde hace años, que no ha logrado nada constructivo en materia de seguridad y que ya es demasiado el daño que ha propiciado a los ciudadanos con sus necedades de cada día.
El nuevo nombre de la Paz es el desarrollo y se construye cada día, con mensajes solidarios y no con mensajes de odio entre los mexicanos.
Sus fijaciones mentales contra los conservadores podrían estar bien a principios del siglo pasado pero hoy solo comunican que sigue usted anclando décadas atrás, culpando a cualquiera de los males que solo usted y sus seguidores son los principales responsables.
No hace falta que me explique que usted y su grupo de operadores políticos (donde caben desde sus secretarios de estado hasta los que llevan los sobres amarillos con efectivo para sus movimientos) están en la lógica de traspaso de los controles del poder, como sucede con todas operaciones autócratas, pero… ¿le servirán de algo sin el acuerdo con la sociedad?
Le queda poco tiempo pero aún puede hacer el intento de gobernar este país, que le ha dado su confianza y ahora está defraudado por usted.
Hasta la próxima en PROSPECTIVA.
José Gerardo Mosqueda Martínez,
Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato
gmg@gerardomosqueda.com.mx