Hay que limpiar a Celaya de las mafias: Rébora
*Se necesita un presidente con muchos pantalones para atender el problema de la inseguridad, después apoyar a los empresarios para seguir generando empleos
POR AGP
Celaya, Gto. (18 de octubre de 2020).- Celaya tiene atributos que la hacen única y con grandes posibilidades de desarrollo, sólo falta limpiarla de las mafias que se han asentado en la zona: para eso se necesita un presidente municipal con muchos pantalones, que establezca estrecha comunicación y colaboración con el gobierno del estado y el gobierno federal, para hacer que esta ciudad y esta región prosperen más allá de lo que todo mundo esperaría.
Gustavo Rébora González, empresario radicado en la ciudad desde hace más de 30 años, ve con angustia el problema de inseguridad en que se encuentra Celaya, problema que no compete sólo al presidente municipal, sino también al gobierno del estado y al gobierno federal, pero también a la sociedad; aunque quien esté al frente del municipio debe asumir esa realidad y emprender acciones que sumen voluntades para enfrentar el problema y resolverlo, tanto desde el ámbito policiaco o militar, como desde el ámbito social.
Al hablar del perfil del próximo presidente municipal dijo que, respetando el tema de género, cree que en este momento se necesita un hombre de mucho carácter, con muchos pantalones, que ame mucho a Celaya y con grandes ilusiones por seguir desarrollando la ciudad, aprovechando las oportunidades que le da su ubicación geográfica y su vocación logística.
A parte de su actividad empresarial, Rébora González es presidente del Patronato del Conservatorio de Música y Artes de Celaya, pero al margen de esa encomienda altruista y voluntaria por su compromiso social, considera que el gobierno debe tener especial atención con la gente emprendedora y nacionalista, porque es la que crea fuentes de trabajo para mucha gente, además de generar su propio patrimonio, que a la larga le permite dedicar su tiempo a otras actividades en beneficios de la sociedad.
Descarta que a Celaya le convenga un gobierno municipal de Morena o de otro partido que no sea el del gobernador, porque tiene que haber una estrecha relación con el gobierno del estado, pues no conviene que estén enfrentados por cuestiones ideológicas. “No es momento de un Morenista”, aseveró.
CELAYA TIENE VALORES, SÓLO HAY QUE LIMPIARLA DE MAFIAS
Celaya tiene atributos, que hacen que confirmes su importancia: su ubicación geográfica, vías de comunicación de primer nivel que se cruzan, el proyecto del Hub del Conocimiento, que se considera un gran acierto, porque van a vender mentefactura y no mano de obra barata.
Lo que se necesita es limpiarla de las mafias y retomar el rumbo con mucha visión de su vocación logística; es un centro natural donde pueden hacer una redistribución de lo que sea: la cuestión agrícola, la educativa, con sus las universidades; de aquí se van para donde quieras, porque es un lugar céntrico.
La inseguridad es la que “nos tiene preocupados, asustados e indecisos de seguir viviendo aquí”; sobre todo, ha afectado a los pequeños y medianos negocios, es una pena cómo cierra la gente por las extorsiones; tocan el esfuerzo de la gente buena”.
APOYO ESPECIAL A SUS EMPRESARIOS
Celaya se debe a su gente trabajadora, sean pequeños o grandes negocios; esta gente que se la rifa, que corre los riesgos de lo que implica una inversión, esta gente debe ser muy respetada, muy considerada, porque de ahí sale la chamba, los impuestos para pagar a los burócratas. Debe haber especial cuidado, un celo, un orgullo, hacia la gente que tiene el talento de hacer empresa, porque el talento del emprendedor es muy particular.
Por su parte, los empresarios deben estar comprometidos a pagar sus impuestos y buenos salarios a sus trabajadores; pero de ahí sale todo, del trabajo fecundo y creador -decía Ruiz Cortines-, sale la estructura económica y social para una comunidad.
El gobierno debe apoyar, acercarse y decir cómo te ayudo, dónde te pones; juntos gobierno y consejo empresarial deben hacer que haya más fuentes de trabajo.
PERFIL DEL PRÓXIMO PRESIDENTE MUNICIPAL
Celaya necesita un candidato y un presidente de muchos pantalones, de mucha presencia, de mucha personalidad y “creo que debe ser un hombre”. Tal vez un buen empresario, humanista, que sepa tratar a su gente, que ya haya hecho su capital y esté dispuesto a trabajar en el sector público.
De preferencia, un joven, entusiasta, enjundioso, que ame a Celaya, que le vea futuro, que a pesar de los pesares, diga: “orale, le entro y resuelvo la inseguridad, promuevo una ciudad limpia, ordenada, jardines bonitos; pero es fundamental que tenga ganas de entrarle al toro.
La situaciones es tan delicada, difícil y grosera que no puede ser una mujer, tiene que ser un hombre de mucho carácter, un celayense, que quiera su suelo, muy ilusionado con seguir desarrollando esta ciudad llena de oportunidades y de futuro, pero cooptado por estas mafias y los que se suman, como “a río revuelto…”
“No puede ser morenista. Tiene que ser del mismo partido del gobernador, es lo ideal. Ahorita no es momento de morenista, tiene que ser alguien de la línea del gobernador. Se habla de que se va a hacer una coalición, pero el candidato debe ser alguien que el gobernador vea con buenos ojos, que tenga el espaldarazo, porque tiene que trabajar con él”.
Además, debe ser joven, de 35 a 45 años, porque se necesita mucha enjundia; pero sobre todo, que él quiera ser, porque luego escogen al último de los que quieren para que sea manejable.
El que sea, se le tiene que apoyar para resolver la cuestión de la seguridad y corregir todo lo chueco que tienen.
LOS PARTIDOS, UNA ENTELEQUIA QUE DECEPCIONA
Acepta que puede haber buenos perfiles en los partidos políticos, pero en este momento hace falta en el gobierno municipal un líder social, preferentemente un celayense que tenga su patrimonio personal consolidado para evitar la tentación de ver el poder público como una forma de enriquecimiento, a fin de que maneje el dinero público con absoluta transparencia y honestidad. “Un empresario humanista puede ocupar ese puesto”.
Los partidos están muy devaluados; ellos deben trabajar en sus ideologías, en sus cuadros, en su manera de pensar, en la autoctonía de la gente, en los valores, en una ideología muy nacionalisrta.
En los partidos se da mucho una bola de arribistas que nada más están viendo donde agarrar chamba y muchos dónde se clavan el dinero, porque el partido no hace su trabajo, porque no tiene sus plataformas juveniles, no tienen valores.
Los partidos son entelequias que decepcionan; ya llevamos muchos años de andar por ahí, desde aquella desilusión de Vicente Fox. Hoy, López Obrador es consecuencia de aquella descomposición que se dio en la máxima casa de estudios; pasar once años en la UNAM, no habla bien de un presidente; qué vida universitaria llevó ese tipo. En sus buenos tiempos, la UNAM fue un orgullo para México.
NO ME VEO AHÍ, PORQUE ME ANGUSTIAN LOS CRÍMENES
Cuestionado sobre la posibilidad de aspirar a la candidatura, dijo: “yo no me veo ahí, porque me angustian los crímenes; para mí la vida es sagrada, no dormiría. Si no hubiera eso ya me hubiera metido, porque me gusta servir y ayudar a la gente”.
Sin embargo, hay que trabajar desde la sociedad, poner especial énfasis a la educación, desde kinder y primaria; que estemos concientes que no vamos a salir adelante si no tenemos ciudadanos de bien, que amen a su país a su terruño, sumando esa serie de valores enumerados antes: ser honestos, ser leales, ser compasivos; necesitamos acercarnos a la gente que menos tienen, hacer verdaderos programas para resolver sus problemas y sembrar la ilusión de vivir.
La formación espiritual es muy importante; no hablamos de religión, sino de la espiritualidad que te enseña a amarse a sí mismo, amar al prójimo, que es la esencia del ser humano, que aprenda a comprometerse y a entender la diferencia entre el bien y el mal.