JÚBILO POR NUEVO OBISPO Y GRATITUD A DON BENJAMÍN
*El trabajo de pastoral continuará de acuerdo plan establecido, en tanto se actualiza; los responsables de los ministerios se mantienen en sus cargos, por el momento
POR AGP
Celaya, Gto. (12 de julio de 2021).- Hay júbilo en la iglesia diocesana de Celaya por la llegada de su nuevo obispo, monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, y gratitud por el trabajo realizado por Don Benjamín Castillo Plascencia, durante poco más de 11 años; el nuevo obispo viene a caminar con el pueblo diocesano para fortalecer las líneas de acción del plan pastoral, mientras se renueva: Iglesia Samaritana, Iglesia que Evangeliza e Iglesia cercana a los más vulnerables. En tanto conoce la diócesis y al presbiterio, ratificó a todos en sus cargos, incluyendo las encomiendas en la Curia Diocesana.
Carlos Sandoval Rangel
El padre Carlos Sandoval Rangel, responsable de la Pastoral Cultural, dijo que la llegada del nuevo obispo representa una bendición para todo el pueblo diocesano, pues viene a unirse al trabajo pastoral y de gobierno de la diócesis de Celaya, donde cada uno de los cuatro obispos que le antecedieron hicieron su parte en el proceso de evangelización, de fortalecimiento de la vida cristiana y de la organización administrativa, durante los 48 años que tiene de existencia.
Hubo miles de fieles de las 83 parroquias que querían estar presentes en la recepción, pero debido a las restricciones sanitarias por la pandemia del Covid-19, sólo hubo acceso para 20 feligreses de cada parroquia, más los invitados especiales, como las autoridades estatales y municipales, una comisión de feligreses de la arquidiócesis de Morelia, que acompañaron al obispo Aguilar Ledesma, donde estaba asignado como obispo auxiliar, y los 200 sacerdotes diocesanos y de otras organizaciones religiosas.
EL PLAN DE PASTORAL NECESITA RENOVARSE
Víctor Alejandro Aguilar Ledesma.
El nuevo obispo de Celaya, que es el V de la diócesis, después de Victorino Álvarez Tena, Jesús Humberto Velázquez Garay, Lázaro Pérez Jiménez y Benjamín Castillo Plascencia, va a tomar un tiempo para conocer las parroquias, los sacerdotes, las organizaciones religiosas y el Plan Diocesano de Pastoral, antes de tomar decisiones.
Si bien, no hay urgencia de tomar decisiones importantes de manera inmediata, es necesario considerar, entre las primeras acciones del nuevo obispo, promover la renovación del Plan Diocesano de Pastoral para adecuarlo a la nueva realidad y retomar los preparativos para la realización del Sínodo Diocesano, que iniciará en octubre y que va a concluir, dentro de tres años, en Roma, con el Sínodo de los Obispos, que básicamente consiste en realizar un análisis y reflexión para tomar conciencia de caminar juntos, escuchando a los fieles de cada parroquia.
Mientras tanto, las actividades de la diócesis continúan con los responsables de cada uno de los ministerios, según les expresó el nuevo obispo en reuniones previas a su llegada a Celaya.
Sandoval Rangel dijo que por parte del presbiterio y de los fieles de la diócesis hay sentimiento de gratitud y reconocimiento al trabajo realizado por Don Benjamín Castillo Plascencia, el cual también hizo suyo el nuevo obispo, pues le reconoció que puso todo su entusiasmo en preparar la recepción y fue quien le dio la bienvenida, recordándole que, aunque se dice que viene a tomar posesión de la diócesis como obispo, son los fieles de la diócesis los que van a tomar posesión de él.
Los sacerdotes de la diócesis esperan con entusiasmo la primera reunión que el nuevo obispo tendrá con ellos, el próximo 19 de julio, en las instalaciones del seminario.
CAMINAR JUNTOS COMO IGLESIA Y RECONSTRUIR EL TEJIDO SOCIAL
