DEL IRREVERENTE FERNÁNDEZ NOROÑA, SENADOR DE LA REPÚBLICA
JOSÉ CARLOS GUERRA AGUILERA
Los gritos son señal de debilidad.
La humillación, es señal de pobreza interior.
La calumnia es señal de envidia.
La agresividad es señal de inseguridad.
El verdadero liderazgo se logra cuando
se es íntegro, humilde, sincero, equitativo, leal y ético.
1.- Fernandez Noroña considera que la Corte es intrascendente. Vaya, vaya. La Corte mexicana, pese a su destrucción, es un pilar de la estabilidad nacional, es absolutamente necesaria, debería ser parte del tripie nacional, para sostener la Nación. Mi respeto amplio, más en estos tiempos de odio contra ella, contra sus integrantes y contra sus ideas. Todos debemos defenderla. Y todos es todos.
2.- Si Fernández Noroña fuera una persona sin cargo público, podría ser intrascendente esa declaración, pero el citado dijo aquello y que la Corte es una vergüenza, y es el Presidente de la Cámara de Senadores, lo cual no debería obligarle a tener respeto.
3.- Gerardo Fernandez Noroña, es un sociólogo que estudió en la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana, sus estudios por supuesto, no norman su conducta.
4.- El citado se quiere hacer identificar con ser representante “del pueblo”, slogan típico del Partido Político al que pertenece. El pueblo mexicano por supuesto es diferente.
5.- Obviamente sus declaraciones son atrapadas por los medios de comunicación ávidos del morbo, de lo espectacular, del ruido. El representante de los Senadores mexicanos tiene seis años para seguir maldiciendo, despreciando, injuriando, calumniando, siendo pendenciero. Se dice que un burro puede fingir ser un caballo, pero tarde o temprano rebuzna. Que triste escribir esto.
