La realidad no cambia por cambiar de año, se requiere decisión, voluntad, constancia y acompañarse de Dios: Sandoval 

*Nuestro entorno podrá cambiar para bien, cuando hagamos las cosas bien y nos rodeamos de personas que hagan el bien: padre Carlos Sandoval Rangel

*Cronología de de Nattahí, también fundado, como Pueblo de Indios de Nuestra Señora de la Asunción, el uno de enero de 1526 y la imagen del Señor del Zapote

POR AGP

Celaya, Gto. (1 de enero de 2023).- La realidad con la que vivimos el 2022 no cambia mágicamente con el cambio de año, se requiere decisión, voluntad, constancia y dejarse acompañar de Dios, quien ilumina, sostiene y fortalece nuestra vida. Como sociedad, se requiere de la voluntad de todos y trabajar arduamente para mejorar nuestra realidad.

Así lo expresó el padre Carlos Sandoval Rangel, titular de la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, que tiene como sede la colonia Jardines de Celaya, quien destacó la importancia del acompañamiento de Dios, “quien nos ayuda a tomar las mejores decisiones e ilumina nuestra vida de manera permanente”.

Como sociedad, también se requiere del trabajo de todos, “rodearnos de personas que realicen acciones de bien y entre todos apoyar a los más vulnerables”.

Nada va a cambiar mágicamente, sólo por cambiar de año; se requiere mucho trabajo de todos y dejarse llevar de la mano de Dios.

 

EL SEÑOR DEL ZAPOTE O SEÑOR DE LA CLEMENCIA

El primero de enero se conmemora la festividad del Señor de la Clemencia en el barrio de El Zapote, en Celaya. El Cristo, que inicialmente fue conocido como El Señor del Zapote, debe su nombre al lugar de su hallazgo, según el historiador Zamarroni.

El hallazgo de la imagen del Cristo del Barrio de El Zapote, se realizó junto a un árbol de zapote, en las inmediaciones de Chamacuero, hoy Comonfort, por un grupo de pobladores de Nattahí o Pueblo de Indios de la Asunción, entre 1563 y 1564, cuando éstos regresaban de San Miguel de Allende, luego de trabajar en construcción de un templo.

El Cristo, como dicen los historiadores -Zamarroni y Luis Velasco- “con fama de aparecido”, empezó a cobrar interés en toda la región por sus milagros y favores que hacía a sus devotos, desde 1564, que se expuso a la veneración en la ermita o capilla del poblado de Nuestra Señora de la Asunción, recién fundado como Pueblo de Indios, antes de la fundación de Zalaya.

El Cristo de los indígenas, como también le llamaban, cobró tal prestigio que rivalizaba en seguidores con el Señor del Hospital de Salamanca.

Pero desde el principio, a algunos miembros del clero, les pareció inapropiado el nombre del Señor del Zapote; sin embargo, aunque intentaron cambiarlo por el de Señor de la Clemencia, no lo lograron en varios siglos, aún cuando desapareció, por largo tiempo, el Pueblo de Nuestra Señora de la Asunción.

 

CRONOLOGÍA DE LOS PRIMEROS 166 AÑOS DE NATTAHÍ 

Nattahí, caserío o pueblo prehispánico, de acuerdo a historiador Rafael Zamarroni, quien también es partidario de que la fundación de Celaya es el uno de enero, día enm que debe celebrarse y no el 12 de octubre, día en que se expidió la cédula real. Otros historiadores también ponen en duda la existencia de Nat tah hi. Zamarroni aporta esta cronología.

1526 (19 de Noviembre) Nattahí fue Sometido al dominio español por Nicolás de San Luis Montañez o Fernando de Tapia, también conocido como Conín (Conni).

1530-1540 Fray Juan de San Miguel funda el Hospitalillo de Nattahí.

1555 Los habitantes de Nattahí huyeron a los Montes, tratando de ponerse a salvo de la peste de Matlalzahuatl.

1562 (1 de Enero) Fue fundado, como Pueblo de Indios de Nuestra Señora de la Asunción, por Don Juan de Villaseñor y Orozco.

1563 Vecinos del poblado hallaron, en las inmediaciones de Chamacuero, una imagen de Cristo crucificado, cuando regresaban de San Miguel el Grande.

1564 Exponen a la veneración pública al Cristo hallado en el monte, junto a un árbol de zapote, por eso le llamaron Señor del Zapote.

1571 (1 enero) En la capilla del Señor del Zapote, se celebró la misa al Espíritu Santo, después los fundadores se trasladaron a la Estancia del Río, donde se eligió el cabildo y se declaró la fundación de la Villa de Zalaya.

1664 (30 de noviembre) El Alcalde Mayor de Zalaya (Selaya), Diego de Monsalve y Aguilar, trató de imponer al gobernador de la Provincia de Acámbaro y al alcalde del pueblo de la Asunción, para el período de 1565.

1665 (enero 23) Triunfo cívico de los naturales de la Provincia de Acámbaro y de la alcaldía del pueblo de la Asunción en contra del Alcalde Mayor de Celaya, a quien obligó el Virrey a entregar las varas de mando a las nuevas autoridades.

1682 (13 de abril) La Real Provisión del Rey Carlos II prohíbe a los alcaldes ordinarios de Zalaya (Selaya) traspasar los límites de la Ciudad con el pueblo de la Asunción, en respuesta a una queja por abusos y vejaciones a los naturales.

1682 a 1692 (no hay fecha exacta) Se anexó el Pueblo de la Asunción a la ciudad de Celaya.

1692 (28 de junio) Se inundó el Pueblo de la Asunción y sus pobladores abandonan el lugar, negándose a reconstruirlo, se fueron a otros barrios y poblados cercanos.